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Matute Howard: un Pumpa con corazón marrón

Conocemos la historia de Tute, jugador mixed ability, en la previa de un partido trascendental para su vida.

Matías Howard tiene 25 años e inició su carrera deportiva como jugador de rugby en Belgrano. Luego, la vida lo llevó por distintos clubes y desafíos, pero -probablemente- ninguno como el que enfrentará este sábado 30 de septiembre, cuando juegue junto a los internacionales “Maris” frente al club español Iruña, y represente a Argentina a la par de su compañero de selección, Daniel Fernández (Pumpas XV y Sur Club). 

The Maris” es un equipo mixed ability del que también participan otras personas con síndrome de down de todo el mundo, en representación de sus respectivos seleccionados nacionales (en el caso argentino, Los Pumpas XV), y que se suele reunir, esporádicamente, para encuentros benéficos o amistosos. Más allá del rival o del motivo del partido, el hecho de ser convocado a este equipo es un honor, ya que se suele citar solo a quienes hayan tenido una actitud y un comportamiento destacado tanto dentro como fuera de la cancha. Otro detalle para ponerle más emoción al próximo encuentro: los convocados a The Maris, solo pueden jugar una vez en su vida en este equipo. En la previa del partido, hablamos con Matías y su padre, Nicolas “Nicky” Howard, para repasar su trayectoria deportiva y su relación, aun al día de hoy, con Belgrano, el club de sus amores. 

Desde pequeño, Tute vistió la camiseta marrón y amarilla (ubicado primero, arriba, desde la derecha).

“Cuando pienso en BAC, pienso en ilusión”, dice Matute con emoción y convicción. Su primer contacto con el rugby fue a los 7 años, cuando comenzó a jugar en Belgrano. En aquel entonces, su entrenador era el actual presidente del Club: Martín Jenkins, acompañado por Federico Forrester. Tute hace memoria y nos cuenta que uno de sus momentos más felices consistía en subirse al mítico balcón de Virrey del Pino y cambiar los carteles acorde al resultado durante los partidos del marrón. 

Luego, años más tarde, su familia se mudó de barrio, cambió de colegio y también de club. Pasó por el Andersen y después al Buenos Aires Rugby & Cricket Club, donde llegó hasta la división M15 y supo jugar de wing.  “Después hubo un parate, dejé de jugar”, cuenta Tute y completa su padre: “… hasta que en 2015, cuando estábamos en el Mundial de Rugby de Inglaterra y nos encontramos con Daniel Fernández, a quien ya conocíamos porque su hijo también tiene síndrome de down. Ahí él nos adelantó que muy pronto iba a fundar Pumpas XV, un equipo de rugby mixed ability que involucraría a jugadores de todo Argentina, y que Matu estaba invitado a formar parte”.

Corriendo con la ovalada.

A partir de ese momento, la vida de Matute y la historia de los Pumpas comenzarían a entrelazarse de una manera muy fuerte e iría en ascenso directo. A tal punto que, en 2017, fueron a jugar el Mundial de Rugby Mixed Ability y… ¡ganaron! En aquel equipo campeón, Tute nos cuenta que jugaba de medio-scrum; “un jugador de toda la cancha”, agrega Nico. Este mítico grupo humano, a lo largo de los años, también le daría lindas amistades: Gonzalo y Matías Viacaba, de CUBA, son algunos compañeros que recuerda Tute de sus primeros entrenamientos, mientras se le esboza una sonrisa. Y, por supuesto, Los Pumpas también le regalarían momentos memorables, como el partido que jugaron junto a Belgrano, en el que Tute -sin dudarlo- se calzó la chocolate y oro. Incluso, su rendimiento y compromiso con Los Pumpas lo catapultarían en el Mundial de Irlanda 2022 junto al seleccionado mixed ability de Sudamérica XV, reconstruyen Matute y Nicky.

Matute, arriba, en el centro, se calza la de Belgrano y se abraza con sus compañeros.

En medio de todos estos años de pura acción en el mundo del rugby, la familia Howard se fue a vivir a España, pero aún así, cada vez que regresan a la Argentina, cuentan que siempre pasan por su segunda casa, Belgrano Athletic Club, para saludar y reencontrarse con seres queridos. Actualmente, Tute entrena con Alcobendas, un club de Madrid con equipo mixed ability, y se prepara para el encuentro del sábado junto a The Maris.

Antes de despedirse, y a pocas horas del partido, Tute explica que -al día de hoy- sigue pensando en Belgrano y que el Club está en su corazón, incluso en la previa de este importante desafío que tiene por delante. “Tenemos el alma de BAC”, afirma Nicky Howard y concluye Tute con un mensaje especial para sus conocidos de la familia marrón: “Extraño mucho el Club, la pasé muy bien ahí; siempre tengo los mejores recuerdos. Mando saludos para todos”, finaliza con una sonrisa mientras agita su mano de un lado a otro mirando a cámara.  

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